Pero si pudieron revelar los datos personales de todos los mexicanos, mediante el pago de una buena lana.
Según la ley los datos que proporcionamos al IFE son considerados confidenciales y no pueden ser divulgados a particulares, bueno eso dice la ley pero como todos sabemos en México las leyes jamás se respetan. Asi que de cualquier forma el gobierno gringo ya nos tiene plenamente identificados, cuando menos a quienes ya teniamos la edad para votar en aquel entonces, pero eso no les alcanza y van a ir por mas.
El vocero de ChoicePoint reconoció en una entrevista concedida al Reforma que la empresa adquirió el padrón electoral mexicano en dos contratos firmados en marzo y septiembre del 2001 con una compañía privada mexicana y no por algún organismo público. También comento que inclusive en sus bases de datos ofrecen los números telefónicos y números de licencia de manejo.
Después de la anterion introducción o recordatorio viene la siguiente noticia de los chavos de Blogotitlan la cual no se me hace nada fuera de la realidad, y es digna de analizarse con detenimiento:
La Credencial Única, Nazismo Puro
Empezó con el CURP o Clave Única del Registro de Población, que pretende unificar los tantos números de cada documento que tiene un mexicano promedio: acta de nacimiento, cartilla del Servicio Militar, pasaporte, licencia de manejo, etcétera.
Ahora el gobierno tecnoburocrático prepara la imposición de un solo documento de identidad, donde se concentre todo trámite que se impone al ciudadano y le sirva como identificación ante toda autoridad. O sea, la vuelta al Nazismo.
La exigencia de credencial o carnet de identidad, papeles probatorios de la personalidad, fue implantada por el régimen policial nazi de Adolfo Hitler, cuando la lúgubre Gestapo o las SS, policía secreta o uniformada, podía detener a cualquier ciudadano, sólo porque se le antojaba o lo creía sospechoso y le exigía “papeles”. La falta de los mismos confirmaban per se la mínima sospecha o malquerencia que tuviera el agente de la autoridad y, en consecuencia, el pobre diablo era automáticamente reo de cualquier delito contra el Estado.
Más de medio siglo después y con el pretexto del antiterrorismo, George Bush ordenó que el Social Security, la licencia de manejo y toda identificación requerida en los Estados Unidos se unifiquen en el USID, una credencial única de identidad, con microchip que haría las veces de huella digital, con el añadido de que servirá para rastrear todo movimiento laboral, social, financiero, educativo, médico, etc., que realice el portador estadounidense. Con ello dicen que se impedirá el cruce de indocumentados y posibles terroristas. La verdad es que será el control policial del gobierno sobre vida y milagros de cada ciudadano.
Quienes no tengan su USID podrán ser detenidos y encarcelados sin formalidad legal alguna ni apelación que valga. Los decretos emitidos por Bush lo autorizan. Otro estado policial sin garantías individuales.
Fiel a los dictados de Washington, el nuevo gobierno espurio de Felipe Calderón prepara, junto con su estado policial que lo proteja del descontento popular, la versión totonaca del USID, para someter a todo mexicano y mexicana al régimen nazional que supuestamente protegerá a los Estados Unidos de actos terroristas.
Es todo un plan fríamente calculado y preparado con anticipación (desde que Fox y Bush se reunieron en San Cristóbal al iniciar el anterior sexenio), pero que pocos lo saben y si lo saben, lo ocultan.
Prepárese a tener, como los canes popis, su michochip si no injertado en su piel, sí en su credencial única que en cualquier momento se la puede exigir un “agente” de la autoridad.
¿Y usted creía que Hitler ya era "historia"?
En lo personal a mi no se me hace que este muy lejos de la realidad, pues estamos hablando de los artifices del fraude electoral, por tanto los creo capaces de esto y mas.