Los cuatro jóvenes mexicanos asesinados en la región de Sucumbíos, Ecuador el primero de marzo del 2008 por el ejército colombiano fueron recordados por los estudiantes de diversas universidades en México al elaborar las tradicionales ofrendas de día de muertos que tuvieron como escenarios las Facultades de Ciencias Políticas y Sociales, de Filosofía y Letras, de Ingeniería y en los jardines de Ciudad Universitaria mejor conocidos como las "islas" de la Universidad Nacional Autónoma de México, así como en la explanada principal de la Universidad Autónoma Chapingo.
El 1 y 2 de noviembre en México celebramos y recordamos a nuestros muertos, como una de las manifestaciones más importantes de nuestros país, y nuestros estudiantes universitarios no son ajenos a esta vieja tradición, pero al mismo tiempo para el caso concreto de los estudiantes: Verónica, Fernando, Juan y Soren Ulises después de ocho meses de asesinados se combate contra el olvido y se reclama Justicia.
La ofrenda nos unió con nuestros difuntos, con la luz de las veladoras, las flores, el pan, los dulces, la fruta, las calaveritas y todas aquellas cosas que eran favoritas de nuestros muertos, no faltando el agua, la sal y todas aquellas cosas que son como un eslabón entre la vida y la muerte.
Nuestros estudiantes universitarios no solo ejercen la cultura milenaria de recordar a los muertos, sino además rinden un homenaje a sus compañeros caídos en Ecuador.
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