En la víspera de que el Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación (TEPJF) califique la elección presidencial del 2 de julio, Andrés Manuel López Obrador declaró que su estado de ánimo "es de lo mejor", y advirtió que el movimiento de resistencia y sus acciones a futuro no están sujetos al fallo de los magistrados.
"Este movimiento ya rebasó, va más allá de la lucha política de que nos respeten la Presidencia de la República. Ahora este movimiento está llamado a transformar al país", expuso.
Frente a sus simpatizantes, que censuraron a los magistrados y los llamaron "¡rateros, rateros!", expresó: "Imagínense cómo estaríamos si sólo dependiéramos de lo que decida el tribunal. Por eso fue muy adecuado abrir el camino hacia la convención nacional democrática".
Ayer, en la asamblea informativa del día 37 de la resistencia civil pacífica, el candidato de la coalición Por el Bien de Todos ratificó su propuesta de que de la convención surja la convocatoria a un nuevo constituyente, e introdujo una nueva figura de liderazgo.
Además de las opciones de que en dicha convención se elija a un presidente de México, a un titular del Poder Ejecutivo, un jefe de gobierno de la resistencia o un presidente de la resistencia, explicó que este lunes se planteó otra "muy interesante: como se le llamaba antes a los verdaderos servidores públicos, comisario del pueblo".
Si bien admitió que la convención "puede ser un sueño, que no tenga frutos, que fracasemos, saben que tenemos la confianza y, sobre todo, la responsabilidad de hacerlo. Si va adelante nuestro movimiento y transformamos al país, será un servicio a la patria de gran valía. Entonces, no nos pongamos timoratos, de que 'a lo mejor sí, a lo mejor no'. ¡Vamos hacia adelante!"
"Velamos armas": Muñoz Ledo
Al comienzo de la asamblea, el ex embajador de México ante la ONU Porfirio Muñoz Ledo afirmó que López Obrador es el "presidente elegido por los mexicanos", y aseguró que, literalmente, la resistencia civil asentada en el Zócalo "está velando armas, armas cívicas y armas políticas. En unas cuantas horas las autoridades electorales dirán su palabra, pero ésta no será la última. La última de las palabras corresponde al pueblo".
A pesar de que se prevé una decisión que favorecerá a Felipe Calderón, Porfirio Muñoz Ledo lanzó ayer un último llamado al tribunal para que mantenga "la continuidad del orden constitucional y no violente el sufragio ciudadano".
Consideró que este martes los poderes constituidos tendrán su última oportunidad para decidir de qué lado está la legalidad, que, sostuvo, está del lado del candidato electo por los ciudadanos.
Advirtió: "en el caso de que decidieran violentar el sufragio público, estarían atentando contra el depósito mismo de la soberanía, que no es otra cosa que la facultad del pueblo para elegir a sus gobernantes, dictarse sus leyes y decidir su destino. Estarían privándolo de su facultad de autodeterminación".
Se violaría además, expuso, el derecho fundamental de los ciudadanos, consagrado en la Constitución, de elegir a sus gobernantes en comicios libres, auténticos y periódicos. "Estarían cancelando la posibilidad de optar por un proyecto distinto de nación por las vías democráticas, estarían cometiendo una provocación histórica", exclamó.
Muñoz Ledo indicó que si bien legalmente concluirá el proceso electoral, aún no termina el de carácter político ni menos la lucha cívica, pues se abre un nuevo periodo del acontecer nacional, en el que, si bien la resistencia civil tendrá que reagrupar fuerzas, lo único que no podrá hacer es avalar la imposición.
Reivindicó luego la demanda inicial de la resistencia civil de voto por voto, casilla por casilla, que posteriormente se transformó en la demanda de sufragio efectivo, no imposición.
"El grito voto por voto, casilla por casilla -delineó-, encierra que cada ciudadano es una persona, no somos una masa, un colectivo informe. Voto por voto significa hombre por hombre, por mujer, ciudadano por ciudadano, conciencia por conciencia."
Después, López Obrador expresó su reconocimiento al respaldo popular y aseguró que ello le ha permitido no sentirse solo. "Siempre me he sentido acompañado por ustedes, estamos todos juntos. Les quiero decir que mi estado de ánimo es de lo mejor, que me siento fortalecido, porque ustedes me apoyan, me respaldan, eso es un estímulo, un aliciente para cualquier dirigente social. Me siento fortalecido y no me doblo, porque defendemos una causa justa", declaró.
Asimismo, defendió el derecho a la movilización, porque, aseguró, "tenemos el legítimo derecho a la defensa legítima, denunciar como lo haría cualquier persona que es ultrajada y robada.
"Y eso es lo que hacemos, defender los votos, lo que decidió nuestro pueblo el 2 de julio. Y me siento muy fortalecido porque este movimiento ya rebasó, va más allá de la lucha política de que nos respeten la Presidencia de la República", afirmó.
El candidato presidencial ponderó que si bien es importante gobernar, también lo es transformar a las instituciones y hacer a un lado el régimen caduco de privilegios, y expuso que para ello se requiere modificar la Constitución.
Como ejemplo del cambio necesario en las instituciones se refirió al rescate del Poder Judicial, que, reiteró, "está secuestrado por Diego Fernández de Cevallos y socios", y explicó que para intervenir en ese poder "sólo la Constitución, y de ahí la importancia de convocar a un constituyente".
Esto llevará tiempo, reconoció, y agregó: "cuando la Independencia se planteó en 1810 la abolición de la esclavitud, ¿qué, se abolió de inmediato? No, llevó tiempo, pero el cura Hidalgo tuvo la visión y la gente tuvo, también, la resolución de que era necesario luchar contra la esclavitud, y así se avanzó hasta conseguirse la libertad. Cuando Juárez tenía que decidir la promulgación de las leyes de Reforma, en el mismo equipo liberal había quienes decían 'no es el tiempo', pero si no lo hubiese hecho, no tendríamos una Reforma y un sistema republicano".
"Este movimiento ya rebasó, va más allá de la lucha política de que nos respeten la Presidencia de la República. Ahora este movimiento está llamado a transformar al país", expuso.
Frente a sus simpatizantes, que censuraron a los magistrados y los llamaron "¡rateros, rateros!", expresó: "Imagínense cómo estaríamos si sólo dependiéramos de lo que decida el tribunal. Por eso fue muy adecuado abrir el camino hacia la convención nacional democrática".
Ayer, en la asamblea informativa del día 37 de la resistencia civil pacífica, el candidato de la coalición Por el Bien de Todos ratificó su propuesta de que de la convención surja la convocatoria a un nuevo constituyente, e introdujo una nueva figura de liderazgo.
Además de las opciones de que en dicha convención se elija a un presidente de México, a un titular del Poder Ejecutivo, un jefe de gobierno de la resistencia o un presidente de la resistencia, explicó que este lunes se planteó otra "muy interesante: como se le llamaba antes a los verdaderos servidores públicos, comisario del pueblo".
Si bien admitió que la convención "puede ser un sueño, que no tenga frutos, que fracasemos, saben que tenemos la confianza y, sobre todo, la responsabilidad de hacerlo. Si va adelante nuestro movimiento y transformamos al país, será un servicio a la patria de gran valía. Entonces, no nos pongamos timoratos, de que 'a lo mejor sí, a lo mejor no'. ¡Vamos hacia adelante!"
"Velamos armas": Muñoz Ledo
Al comienzo de la asamblea, el ex embajador de México ante la ONU Porfirio Muñoz Ledo afirmó que López Obrador es el "presidente elegido por los mexicanos", y aseguró que, literalmente, la resistencia civil asentada en el Zócalo "está velando armas, armas cívicas y armas políticas. En unas cuantas horas las autoridades electorales dirán su palabra, pero ésta no será la última. La última de las palabras corresponde al pueblo".
A pesar de que se prevé una decisión que favorecerá a Felipe Calderón, Porfirio Muñoz Ledo lanzó ayer un último llamado al tribunal para que mantenga "la continuidad del orden constitucional y no violente el sufragio ciudadano".
Consideró que este martes los poderes constituidos tendrán su última oportunidad para decidir de qué lado está la legalidad, que, sostuvo, está del lado del candidato electo por los ciudadanos.
Advirtió: "en el caso de que decidieran violentar el sufragio público, estarían atentando contra el depósito mismo de la soberanía, que no es otra cosa que la facultad del pueblo para elegir a sus gobernantes, dictarse sus leyes y decidir su destino. Estarían privándolo de su facultad de autodeterminación".
Se violaría además, expuso, el derecho fundamental de los ciudadanos, consagrado en la Constitución, de elegir a sus gobernantes en comicios libres, auténticos y periódicos. "Estarían cancelando la posibilidad de optar por un proyecto distinto de nación por las vías democráticas, estarían cometiendo una provocación histórica", exclamó.
Muñoz Ledo indicó que si bien legalmente concluirá el proceso electoral, aún no termina el de carácter político ni menos la lucha cívica, pues se abre un nuevo periodo del acontecer nacional, en el que, si bien la resistencia civil tendrá que reagrupar fuerzas, lo único que no podrá hacer es avalar la imposición.
Reivindicó luego la demanda inicial de la resistencia civil de voto por voto, casilla por casilla, que posteriormente se transformó en la demanda de sufragio efectivo, no imposición.
"El grito voto por voto, casilla por casilla -delineó-, encierra que cada ciudadano es una persona, no somos una masa, un colectivo informe. Voto por voto significa hombre por hombre, por mujer, ciudadano por ciudadano, conciencia por conciencia."
Después, López Obrador expresó su reconocimiento al respaldo popular y aseguró que ello le ha permitido no sentirse solo. "Siempre me he sentido acompañado por ustedes, estamos todos juntos. Les quiero decir que mi estado de ánimo es de lo mejor, que me siento fortalecido, porque ustedes me apoyan, me respaldan, eso es un estímulo, un aliciente para cualquier dirigente social. Me siento fortalecido y no me doblo, porque defendemos una causa justa", declaró.
Asimismo, defendió el derecho a la movilización, porque, aseguró, "tenemos el legítimo derecho a la defensa legítima, denunciar como lo haría cualquier persona que es ultrajada y robada.
"Y eso es lo que hacemos, defender los votos, lo que decidió nuestro pueblo el 2 de julio. Y me siento muy fortalecido porque este movimiento ya rebasó, va más allá de la lucha política de que nos respeten la Presidencia de la República", afirmó.
El candidato presidencial ponderó que si bien es importante gobernar, también lo es transformar a las instituciones y hacer a un lado el régimen caduco de privilegios, y expuso que para ello se requiere modificar la Constitución.
Como ejemplo del cambio necesario en las instituciones se refirió al rescate del Poder Judicial, que, reiteró, "está secuestrado por Diego Fernández de Cevallos y socios", y explicó que para intervenir en ese poder "sólo la Constitución, y de ahí la importancia de convocar a un constituyente".
Esto llevará tiempo, reconoció, y agregó: "cuando la Independencia se planteó en 1810 la abolición de la esclavitud, ¿qué, se abolió de inmediato? No, llevó tiempo, pero el cura Hidalgo tuvo la visión y la gente tuvo, también, la resolución de que era necesario luchar contra la esclavitud, y así se avanzó hasta conseguirse la libertad. Cuando Juárez tenía que decidir la promulgación de las leyes de Reforma, en el mismo equipo liberal había quienes decían 'no es el tiempo', pero si no lo hubiese hecho, no tendríamos una Reforma y un sistema republicano".
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