isaín mandujano
Tuxtla Gutiérrez, Chis., 9 de febrero (apro).- El Ejército Zapatista de Liberación Nacional (EZLN) denunció que las campañas contra el narcotráfico son pura farsa, pues dichos operativos son “meros pretextos para aumentar la ya de por sí desproporcionada militarización del Chiapas rural”.
En un comunicado, el subcomandante Marcos dijo que dichos operativos son pura farsa, al igual que las elecciones que llevaron al poder el panista Felipe Calderón, pues en los municipios con gobiernos oficiales es público el encubrimiento que las autoridades hacen de quienes trafican con autos robados y con quienes siembran drogas y las venden.
El Ejército federal, cuando llega a destruir plantíos de mariguana, sólo destruye las plantas maduras, y sin embargo no toca los retoños, “esto con el fin de tener un pretexto para regresar y tratar de intimidar así a los pueblos zapatistas”, observó el vocero del EZLN.
Dijo que las autoridades ni siquiera conocen bien a bien la geografía del estado, pues ubican la destrucción de plantíos como si estuvieran en territorios zapatistas, siendo que cualquiera sabe que son terrenos gobernados por autoridades pertenecientes al PRI o al PRD.
“Desde su nacimiento, el EZLN tiene prohibido la siembra, el tráfico y el uso de drogas --así como la comercialización y el uso de alcohol--, y así lo han refrendado las autoridades civiles autónomas”, apuntó Marcos.
Dijo que a pesar de que el panista Luis Héctor Álvarez, “antiguo e inútil comisionado para la paz con Vicente Fox, y ahora burócrata ‘indigenista’ con Calderón Hinojosa, ha declarado una y otra vez que el EZLN es cosa del pasado, que ya no tiene fuerza, que ya desapareció, no sólo no ha disminuido la presencia militar en Chiapas, sino que se ha incrementado”.
“Si ya no existimos, si somos ‘cosa del pasado’, si ya no tenemos fuerza, ¿por qué mantienen y refuerzan la militarización, como en los tiempos de Ernesto Zedillo?”, se preguntó el líder zapatista.
No a paramilitares
Por otra parte, y en comunicado adjunto, advirtió que si el grupo paramilitar Organización de Defensa de los Derechos Indígenas y Campesinos (OPDDIC) ataca a sus bases de apoyo, ellos defenderán las tierras de las que pretenden despojarlos.
“No importa cuántos soldados, policías o paramilitares vengan, cuidaremos la tierra que guarda a nuestros muertos, aun a costa de nuestra libertad o de nuestra vida”, dijo el sub, al denunciar que el gobierno “está preparando nuevos grupos de paramilitares, ahora bajo el disfraz de ‘organizaciones indígenas’ como la OPDDIC”.
Señaló que la OPDDIC está dirigida por Pedro Chulín, priista y conocido promotor de grupos paramilitares, financiados por las autoridades y entrenados y abastecidos por el Ejército federal.
“El señor Pedro Chulín empezó sus fechorías con El Croquetas Albores Guillén y, desde entonces, ha contado con la complicidad de los siguientes gobiernos estatales y de los partidos políticos electorales. En los últimos días, este señor y miembros de su banda han declarado que poseen las armas y la autorización del gobierno para provocar enfrentamientos con bases de apoyo zapatistas, esto con el fin de presentar la imagen de choques entre indígenas, y justificar así una intervención masiva de las fuerzas federales”, denunció el vocero zapatista.
Dijo que la OPDDIC es una organización criminal, y “según investigaciones del EZLN, es la responsable directa del asesinato de indígenas --en un principio erróneamente identificados como bases de apoyo zapatistas--, ocurrido en noviembre del año pasado, en la comunidad de Viejo Velasco Suárez, y se mantienen en la impunidad gracias a sus relaciones con el gobierno”.
Acusó que la OPDDIC, siguiendo los pasos de la organización paramilitar Paz y Justicia en el norte de Chiapas, se ha dedicado a amenazar de muerte a miembros de ONG que, en Chiapas, se dedican a la defensa de los derechos humanos y del medio ambiente.
“Tales son los casos de la organización ecologista Maderas del Pueblo del Sureste, y de los Centros de Derechos Humanos Fray Bartolomé de las Casas y Fray Lorenzo de la Nada, cuyos miembros han sido amenazados abiertamente por la OPDDIC sin que las autoridades hagan nada”, indicó Marcos.
Explicó que, en los últimos días, la dirección de la OPDDIC ha enviado correspondencia, firmada por sus dirigentes, amenazando a familias enteras con ser desalojadas o atacadas por el delito de no afiliarse a su banda paramilitar, o por no permitir el tráfico de madera.
“A la OPDDIC, al señor Pedro Chulín y a las autoridades gubernamentales les decimos que estamos preparados y dispuestos a defender a nuestros pueblos, y a hacer que se cumplan las leyes indígenas que protegen los árboles y la naturaleza de la selva Lacandona, prohibiendo la tala y el tráfico de maderas preciosas, así como la siembra, tráfico y consumo de narcóticos”, indicó Marcos en su carta.
“Les decimos que si están dispuestos a reiniciar la guerra con esos medios, aunque disfrazándola de ‘enfrentamiento entre indígenas’, y amparados en las poses militaristas del señor Calderón, nosotros también estamos dispuestos y listos. Si piensan que así detendrán nuestro proyecto político de ‘La Otra campaña’, les decimos que se equivocan. Durante años nos preparamos para este esfuerzo civil y pacífico de transformación real y profunda de nuestro país, aun en medio de una guerra”, advirtió.
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